Yo estoy tan firmemente convencido de que las religiones hacen daño, como lo estoy de que son falsas.
-- Bertrand Russell
"Por que atacar la religión si no le hace daño a nadie?" esta es probablemente una de las respuestas más comunes a cualquier expresión de ateísmo. Y desde la perspectiva de un no creyente es quizá el más claro ejemplo de lo efectivas que pueden ser las religiones en general para nublar el juicio de sus seguidores.
Creer en algo que no puede ser demostrado y que en principio es ilógico tiene una gran cantidad de costos que en mayor o menor grado afectan a toda la sociedad, los costos de la religión históricamente han sido bastante altos y han sido fácilmente camuflados en falsos principios de moral como se mencionó en un post anterior
El costo de la crítica
En una religión revelada se instruye desde edades tempranas a creer sin objetar, esto castra en alguna medida el pensamiento crítico y hace que ante verdades expuestas por figuras de autoridad no exista la posibilidad de oposición o crítica. Enseñarle a un niño que no puede cuestionar la palabra de Dios no es diferente a enseñarle que no puede oponerse a sus gobernantes o a sus superiores aún si sus mandatos son irracionales. Esto suena un poco extremista y seguramente hay una gran cantidad de contraejemplos, aún así aunque no la anule, el hecho de no poder cuestionar una de las autoridades (la religión) limita la capacidad crítica. Es claro que esto tiene un efecto negativo en la sociedad ya que la hace susceptible al abuso y la explotación. Quizá es por esto que gobiernos como los de Suiza y Finlandia donde la religión es poco influyente, son tan eficientes y los de países latinoamericanos altamente religiosos son tan corruptos.
El costo de la curiosidad
Ser curioso respecto a los principios explicados en las religiones reveladas representa un atentado contra le fe, por ejemplo, todos los libros sagrados explican de manera absoluta el origen del universo, querer responder esta pregunta por medios científicos claramente cuestiona la fé y si no hubiese sido por algunos pocos valientes algunos siglos atrás que arriesgaron su vida por la verdad, todavía creeríamos que la tierra es el centro del universo y que Adan y Eva originaron toda la especie humana. Las religiones reveladas tienen como esencia explicar nuestros orígenes, propósito y destinos durante nuestra existencia, siendo estas las preguntas más trascendentales es lógico ser curioso al respecto, sin embargo la religión se encarga de dar una respuesta absoluta, definitiva e incuestionable eliminando cualquier posibilidad de investigación al respecto. Es un requisito indispensable de cualquiera que pretenda explorar alternativas a las explicaciones religiosas dejar de lado su fé y hacer preguntas objetivas. Religiones como el mormonismo o el cristianismo recurren a "interpretaciones" pero solo cuando la evidencia es abrumadora y es imposible seguir sosteniendo la revelación original, religiones más extremas como el islam simplemente cierran sus puertas al conocimiento.
El costo de la curiosidad es el de frenar la investigación y por consiguiente el desarrollo al imponer obstáculos "morales".
El costo del conocimiento y el desarrollo
Derivado del párrafo anterior viene el costo del conocimiento, por la misma resistencia de las religiones a aceptar evidencias que contradigan de alguna manera sus escrituras gran parte del conocimiento es ocultado o retrasado al máximo, hoy día en estados unidos todavía hay grupos que pretenden imponer el creacionismo y prohibir la enseñanza de la evolución en los colegios, en este país cerca del 50% de la población no acepta la evolución (probablemente porque no la entienden y no tienen la curiosidad suficiente para investigar) y afirman con seguridad absoluta que todos somos descendientes de Adán y Eva. Negar hechos ampliamente demostrados y de los cuales no existe ninguna duda razonable atenta gravemente contra el desarrollo, no aceptar un hecho tan claro como la evolución implica rechazar teorías como la del big bang o los múltiples universos que aún requieren demostraciones pero que son infinitamente más probables que la creación diseñada!
El costo de la interpretación
Durante siglos nos han hecho creer que las escrituras son demasiado avanzadas para una persona común y que deben ser "interpretadas" por personas iluminadas o que han hecho votos especiales para tener tal poder. Es probable que hace 2000 años esto fuese verdad, pero hoy en día, cualquier persona, incluso la más iletrada tiene una capacidad intelectual superior al más avanzado de los humanos de hace 2000 años. La biblia es clara, no hace falta que nadie la lea y la interprete por usted, aún las metáforas y parábolas son fácilmente descifrables sin necesidad de ayuda.
Piense esto, ¿no sería posible escoger de la biblia pasajes para manipular una sociedad y hacerla creer cualquier cosa? claro que es posible, de hecho a ocurrido innumerables veces, se han invadido países quemado brujas, instalado gobiernos, discriminado minorías, etc. Y todo esto interpretando escrituras sagradas.
El costo de la interpretación es claro, siempre que estén sujetas a interpretación las escrituras sagradas serán una poderosa arma de manipulación.
La raíz del problema
Todo el problema se reduce al principio mismo de las religiones, y es la fe como virtud! La fe, definida como creer en ausencia de evidencia es probablemente la más terrible de las características en términos de sus consecuencias. Creer por el solo hecho de provenir de una fuente que consideramos confiable adormece nuestras propias capacidades de inferencia y razón.
El costo más alto de la religión es dar todas las respuestas a las preguntas más trascendentales y prohibir deducir respuestas alternativas. Por eso es necesario dejar de considerar la religión como un movimiento inocente y hacer lo posible por eliminarlas de nuestras sociedades.
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